Restaura tus sillas de jardín de hierro y devuélveles su esplendor | Guía paso a paso

Restaura tus sillas de jardín de hierro y devuélveles su esplendor | Guía paso a paso

Restaurar sillas de jardín de hierro

Introducción

Las sillas de jardin de hierro son un complemento perfecto para cualquier espacio exterior. Sin embargo, con el paso del tiempo y las condiciones climáticas a las que se exponen, pueden deteriorarse y perder su belleza original. En este artículo te explicaremos los pasos a seguir para restaurar sillas de jardín de hierro y dejarlas como nuevas.

Paso 1: Limpiar las sillas

Lo primero que debemos hacer es limpiar bien las sillas de jardín de hierro. Para ello, podemos utilizar un cepillo de cerdas duras y agua con jabón. Es importante retirar todas las impurezas antes de comenzar con la restauración.

Consejo:

Si las sillas presentan mucho óxido, podemos utilizar una lija de grano grueso para quitarlo, sin embargo, si los daños son menores, evitaremos utilizar este recurso, ya que podríamos dañar aún más el hierro.

Paso 2: Eliminar el óxido

Si las sillas presentan óxido, podemos eliminarlo con un producto específico para ello. Existen en el mercado diferentes tipos de limpiadores para óxido, que se utilizan en función del tipo de hierro y de la cantidad de óxido que presente la silla.

Consejo:

Es importante utilizar guantes y gafas de protección al manipular estos productos, ya que pueden ser tóxicos.

Paso 3: Pintar las sillas

Una vez que hemos limpiado y eliminado el óxido de las sillas, podemos comenzar a pintarlas. Es recomendable utilizar una pintura específica para hierro, ya que esta pintura protegerá las sillas de jardín de futuras oxidaciones.

Consejo:

  • Utiliza una brocha suave para aplicar la pintura.
  • Es recomendable dar más de una capa de pintura para garantizar una mayor durabilidad de la misma.
  • Es importante darle a la silla los tiempos necesarios entre capa y capa para que la pintura seque correctamente.

Paso 4: Proteger las sillas

Para proteger las sillas de jardín de hierro una vez que las hemos restaurado, podemos aplicar una capa de protector de metal. Este producto es ideal para proteger las sillas de la lluvia, el sol y otros agentes externos que pueden dañarlas.

Consejo:

Es recomendable aplicar el protector de metal una vez al año para garantizar una mayor durabilidad de las sillas.

Conclusión

Restaurar sillas de jardín de hierro puede parecer un proceso complicado, pero siguiendo estos sencillos pasos, podemos conseguir que nuestras sillas luzcan como nuevas. No olvides protegerlas después de la restauración, para garantizar su durabilidad.

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